El cáncer de mama es la segunda causa de muerte en mujeres de países pobres, solo lo supera el cáncer de cérvix o del cuello del útero. Este último, ha bajado su número de casos con la aplicación masiva de la prueba de Papanicolau, en países desarrollados.
La detección del cáncer de mama se inicia con el descubrimiento de una masa en el seno, hecho que puede ser identificado por la mujer o su médico.
Es sabido por un gran grupo de mujeres, a través de una gran campaña publicitaria, la importancia del autoexamen. Ahora bien, por referencia de uno de los mejores mastólogos de República Dominicana, el Dr. Miguel Oller, este esfuerzo solo ha reducido en un 1% la detección de la enfermedad. Debía ser otro el resultado.
El examen de las mamas de una paciente es responsabilidad de cualquier médico que examine a la misma, sea este: cirujano, ginecólogo-obstetra, internista-cardiólogo, mastólogo o médico general.
Lo ideal es empezar el trabajo inclusive antes de que aparezca una masa que llame la atención, y para esto, los profesionales de la salud pueden aprovecharse de los recursos diagnósticos rutinarios ya que pueden ser la clave para el éxito.
Estos recursos son:
- Sonomamografía. Se aplica en cualquier edad de la mujer: niñas, adolescentes, adultas jóvenes, a cualquiera y sin molestias. Este tipo de sonografía es capaz de identificar masas de tamaño tan pequeñas como medio centímetro (5 mm). El especialista puede, basándose en sus características, tales como: tamaño, forma, bordes, y vascularidad, orientarse para saber si un tumor es benigno o maligno.
- Doppler vascular. Esta alternativa asegura la identificación de malignidad por la presencia de vasos y sus características, así como por las velocidades del flujo en los mismos.
- Mamografía. Este estudio tiene que realizarse en un área especializada y está recomendada para mujeres de 35 a 40 años en adelante, según diferentes sociedades especializadas. Su realización, sin lugar a dudas es la más específica en la detección de las señales más pequeñas, llamadas microcalcificaciones, las que no son detectadas por el sonógrafo. La mamografía es la prueba más fiable en la detección del cáncer de mama. Es importante destacar que debe repetirse cada dos años y que se recomienda tener las imágenes anteriores para ser comparadas con las actuales. De esa forma el especialista puede realizar una evaluación comparativa en el tiempo.[/box]
¿Cuál de los estudios es mejor?
El más importante es la mamografía. Cabe destacar que la sonomamografía y la mamografía se complementan en lo que se llama “perfil mamario”, donde primero se hace la mamografía y se complementa con la sonomamografía que diferencia mejor lo líquido de lo sólido.
Por último, pasamos a la biopsia, que dice con exactitud definitiva cual es el tipo de tejido que se está analizando. En base a esta información se establece el tratamiento más apropiado.
La asistencia médica rutinaria y minuciosa, acompañada de los recursos técnicos apropiados es la mejor forma de detectar el cáncer de mama.
¿Cómo puedo prevenirlo?
El cáncer de mama no se previene, llega sin avisar y sin ser invitado, aunque es más frecuente en las mujeres, puede afectar al hombre, aunque en menor proporción, pues recordemos que tienen mamas (tetillas).
Existen ciertos factores presdisponentes que tenemos que tener en consideración, la herencia familiar, y la edad son los de mayor importancia.
¿Cuál sería la mejor forma de detectarlo a tiempo?
- Autoexamen de las mamas.
- Exámenes periódicos por ginecólogo u oncólogo.
- Mamografías y sonomamografías.
- Aunque muchas veces quien descubre algo anormal es la pareja sexual, al través de las caricias en las mamas, situación que ocurre muy a menudo.
¿Cuáles serían los signos que debo tomar en cuenta?
- Una pelotita o masa en la axila.
- Una masa en las mamas.
- Una masa encima de las clavículas o al lado del cuello.
- Si el pezón se hunde.
- Secreción por el pezón.
- Cualquier cambio de coloración en las mamas.
- Hallazgo casual en la mamografía.
- Deformidad o ulceración en las mamas.
- Descamación del pezón.
De aparecer cualquiera de estas señales acude al oncólogo, pues a tiempo se puede solucionar con mayor facilidad ya que hoy los cánceres de mama se curan.
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