Los preservativos son un método de barrera muy útil para prevenir todo tipo de infecciones de transmisión sexual. Se piensa que el nombre “condón” proviene del latín “condus” que significa “receptáculo”.
El uso del condón se convirtió en un asunto de salud pública con la aparición del Sida. Sin embargo, el preservativo es muy ventajoso porque previene infecciones de transmisión sexual, no tiene efectos secundarios, evita embarazos no deseados, puede interrumpirse su uso en cualquier momento y se adquiere con facilidad sin necesidad de ver a un especialista.
En el caso de una relación sexual inesperada, pueden usarlo tanto los hombres como las mujeres y aumenta el goce sexual al saber que no existe preocupación.
Ahora bien, es frecuente que exista un cambio en la estimulación del pene cuando se coloca el preservativo. Este cambio no implica necesariamente una disminución de la sensibilidad, pero sin duda es un cambio al que hay que acostumbrarse.
Esta es una de las razones por las cuales algunos hombres pierden un poco de la erección al utilizar preservativos. Esto es perfectamente superable simplemente con la práctica.
Otra razón por la cual algunos hombres pierden la erección al colocárselo es cuando lo hacen interrumpiendo el acto sexual, para luego de colocado reiniciarlo. En estos casos es frecuente que se pierda parte de la erección.
Lo recomendable es que el preservativo sea colocado como parte del acto sexual mismo. Quizás la compañera o compañero sexual puede colocarlo a su pareja de manera erótica, como parte del juego sexual, sin que deba ser interrumpido el acto con el consecuente “enfriamiento”.
En ocasiones el colocar el condón por parte de la compañera puede ser un motivo para crear un momento muy erótico, intensificando la erección en lugar de “sabotearla”. Algunas mujeres han aprendido a colocarlo con la boca, mientras hacen fellatio (sexo oral) a su compañero y esto, sin duda, resultará en una experiencia muy excitante para ambos.
Hoy en día contamos en el mercado con preservativos muy variados, lo que permite probar con cual diseño se siente mejor, o quizás utilizarlos todos como forma de ir variando y experimentado conjuntamente con la pareja.
Es posible comprar condones con sabores y colores (incluyendo unos que brillan en la oscuridad), texturas variadas, incluyendo ultrafinos y ultragruesos, con ribetes, con tachones, algunos hasta tienen un chip que suena una canción que se activa con el calor del pene.
Es necesario precisar que un porcentaje muy pequeño de hombres y mujeres reportan alergia al látex, lo que determina que NO puedan utilizar preservativos, pero son casos muy extraños.
No obstante lo anterior, existen factores relacionados con las creencias, mitos y tabúes que pueden afectar la concentración del hombre al momento de colocarse un preservativo y que pueden estar en la base de una pérdida de la excitación durante el acto sexual. En este último caso, lo recomendable es buscar ayuda psicológica con un terapeuta sexual.
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